Para Heather Bauer, el aniversario del 11 de septiembre 2001 significa algo más que el derrumbe de las Torres Gemelas, los escombros humeantes del Pentágono y la caída de un avión en un campo de Pensilvania.
En vez de aceptar el consenso general de que Al Qaeda llevó a cabo esos ataques, ella cree que el gobierno estadounidense es el principal responsable. Una de las mentiras reiteradas en eventos con motivo de los 20 años de los atentados del 11 de septiembre de 2001.
“Cuestiono absolutamente todo ahora, y me pregunto cuánto de lo que nos han dicho es realmente cierto”, dice Bauer. Y eso incluye la existencia del COVID-19, en la que no cree.
Ama de casa en Wisconsin, Bauer tenía 14 años cuando los ataques a las Torres Gemelas dejaron casi 3 mil muertos.
Durante años creyó en la versión oficial, antes de caer en la teoría de la conspiración QAnon. Ahora piensa que los ataques fueron orquestados para justificar la guerra en Irak que siguió en 2003. Es una ferviente adherente del movimiento de escépticos sobre los eventos del 11/9, cuyos miembros discuten sin cansarse supuestas evidencias sobre una demolición controlada de las Torres Gemelas.
La teoría fue desarrollada con minucia durante los últimos 20 años, y ha sido desmentida con igual parsimonia por documentalistas y periodistas.
Con argumentos como que “el combustible de los aviones no puede fundir vigas de acero”, busca demostrar que alguien debe haber sembrado explosivos en las torres, ya que no podrían haber colapsado tan precisamente al ser alcanzadas por aviones. (Con información de Agencias)