Raphael ofreció un concierto multitudinario en el Wizink Center de Madrid, donde reunió a casi cinco mil personas y aquí cabe preguntarse si el Divo de Linares y la promotora tomaron las medidas necesarias para evitar algún contagio entre los asistentes o el mismo equipo de producción.
A pesar de que en España se han dado diferentes casos de rebrote del coronavirus desde el inicio de la pandemia y que las medidas para las fiestas navideñas están siendo muy rígidas, este show se llevó a cabo en un aparente cerco sanitario que evitaría cualquier caso de emergencia entre los asistentes, quienes en su mayoría portaban cubrebocas, más no así se nota el distanciamiento a pesar de notarse algunas butacas vacías.
Esto, inmediatamente generó diversos comentarios en las redes sociales, por lo que ejecutivos del pabellón emitieron un comunicado oficial argumentando que las medidas tomadas fueron estrictas para poder celebrar el evento e incluso duplicaron el espacio “permitido” entre lugares.
Por otro lado, Isabel Díaz Ayuso, presidenta regional de Madrid, asegura que el espectáculo se celebró “con todas las medidas de seguridad, pero si suben los índices de contagios en el país, inmediatamente se suspenderán todos los eventos similares”.
El recinto tuvo un aforo aproximado al treinta por ciento, a pesar de tener una normativa de hasta el 40% de su capacidad total, que es de 18 mil lugares.
Muchos de los asistentes se mostraron molestos por los comentarios emitidos e inmediatamente pelearon por su postura argumentando que todo fue controlado desde la llegada, donde les fue tomada la temperatura y se les pidió respetar los protocolos de sanidad.
Por su parte, Raphael se mostraba contento con la presentación, pues festejaba sesenta años de trayectoria y ante sus seguidores en el Wizink Center desbordó pasión al interpretar los temas que lo han hecho un grande en la música.
Por: Adrián Muñoz