La noche de ayer se transmitió la séptima entrega de “MasterChef Celebrity”. La competencia culinaria avanza y con ello el nivel de exigencia por parte de los expertos, aumenta. Las celebridades que aún se encuentran en este reality están dispuestas a entregar su mejor sazón en cada platillo, con el fin de permanecer dentro de la cocina más famosa de México. “El Mar”, fue la temática perfecta para poner a prueba a los famosos y para explotar su lado más creativo y perceptivo al cocinar.
En esta ocasión la caja misteriosa estaba repleta de sorpresas, ya que no era una sola caja a descubrir sino cuatro. En ellas, se encontraban todos los elementos necesarios para cocinar La cena del capitán. Y como era de esperarse, una cena para el capitán de un barco tenía que reunir ciertas exigencias, por lo que una vez más el chef Fernando Stovell se unió a la línea de jueces para calificar a los cocineros. La dinámica inicial consistió en descubrir nuevos ingredientes de forma paulatina con intervalos de quince minutos, por lo que los famosos tuvieron que ejercer su intuición y paciencia para así crear un platillo digno de un verdadero capitán.
Así, con mercado cerrado y con sesenta minutos para cocinar, las celebridades prepararon sus platillos con los únicos ingredientes otorgados: ajo, cebolla, camarones, crema, mantequilla, queso, harina, huevo, tamarindo, chile chipotle, guajillo, vinagre y anchoas. Para esta prueba, los chefs decidieron que quienes pasarían al frente serían los cocineros con los platos peor ejecutados, a diferencia de las entregas pasadas en las que los requeridos solían ser los más prometedores. Las personalidades solicitadas al frente fueron Stepahnie Salas, Tony Balardi, Bebeshita, Germán Montero, David Salomón y Paco chacón.
Stepahine Salas presentó sus camarones “Micky Salas” pero fueron considerados por los chefs como sobre cocidos y con una salsa desabrida. Tony Balardi ofreció sus camarones “Duerme bien sin pesadillas”, pero no peló dicha proteína, hecho que fue considerado como un error garrafal. Por su parte, Bebeshita nombró a su platillo “Camaroncitos nalgones”, mismos que tuvieron tres intentos de salsa fallida y diferente nivel de cocción, a consideración de los jueces. Germán Montero los bautizó como “Camarones mi banda”, sin embargo, fue calificado como un plato carente de equilibrio y pasado de sal. David Salomón los denominó “Camarón que oye consejo llega a viejo”, la mayor crítica fue la mala presentación de dicho platillo.
Finalmente, fue Paco Chacón quien presentó sus “Camarones fair play” mismos que no recibieron crítica, sólo fueron cuestionados. Ante dicha situación, el árbitro defendió a toda costa su platillo y por tal razón fue felicitado por los expertos, quienes lo asumieron como un excelente plato, digno de la cena del capitán de un barco. Esta dinámica dejó como enseñanza a los famosos que –Se aprende más de los errores que de los aciertos. – Los chefs deliberaron que las fallas de Stephanie y Germán eran menores, por lo que decidieron salvarlos y mandarlos a balcón. Tony, Bebeshita y David quedaron sentenciados, por tanto, acreedores al mandil negro.
El segundo reto de la noche fue la fuente afrodisiaca de mariscos. Para este desafío la cocina de “MasterChef Celebrity” se inundó de sensualidad con la presencia del chef peruano Franco Noriega, quien desató suspiros entre las famosas participantes. Esta vez los cocineros sentenciados se convirtieron en capitanes y por medio de la elección de un crucero se les asignó el color del equipo que comandarían. Los equipos quedaron conformados de la siguiente manera: Equipo azul – Bebeshita, Laura Flores, Laura Zapata y Stephanie Salas. Equipo rojo – David Salomón, Dalú, Germán Montero, Aristeo Cazares y Paco Chacón. Equipo amarillo – Tony Balardi, Mauricio Islas, Patricia Navidad, Choco y Aida Cuevas.
Así, los equipos tuvieron la tarea de armar la mejor fuente afrodisiaca de mariscos. Para las famosas el chef Noriega fue un deleite e inspiración, y no dudaron en darle a probar algunos ingredientes considerados afrodisiacos como el chocolate y los frutos rojos. En medio de una divertida dinámica, los capitanes delegaron tareas al resto del equipo y así, armaron sus respectivas fuentes de mariscos, mismas que fueron presentadas a los expertos de esta cocina: los chefs Betty Vázquez, José Ramón Castillo, Adrián Herrera y el invitado de lujo, el chef Franco Noriega.
Los resultados de este reto fueron sumamente interesantes. A consideración de los especialistas, el equipo amarillo presentó una fuente con un ceviche tipo oriental, gustó porque recuperó el sabor fresco. Además, presentó guarniciones bien logradas, una buena acidez y la textura de las salsas fue la adecuada. A criterio de los jueces, el equipo azul respetó la frescura del ostión, la presentación fue espectacular, el arroz perfectamente ejecutado. Y el plus: un gran acierto el langostino cocido con limón. Desafortunadamente, al equipo rojo no le fue bien con los chefs, ya que describieron su fuente como desordenada, saturada y errónea. Además, comentaron que el pescado fue mal trabajado pues aún tenía espinas. La presentación desbordaba la comida, y los ostiones quedaron nadando en el agua del hielo.
Por lo anterior, los jueces deliberaron al equipo azul como ganador de este reto. El equipo amarillo también subió a balcón. Así, tanto Bebeshita como Tony Balardi (con sus respectivos equipos), se salvaron del reto de eliminación. El equipo rojo se hizo acreedor al mandil negro y pasaron a línea de expulsión. Para el reto de eliminación, los famosos tuvieron que preparar pulpo, no sin antes escuchar consejos y recomendaciones por parte de los chefs. Sin duda, la sazón, intuición y seguridad de cada uno de los cocineros, se puso a prueba en la etapa final de esta entrega.
Transcurridos los sesenta minutos que los famosos tuvieron para cocinar el pulpo, fueron llamados a presentar sus respectivos platos. Germán lo nombró “Pulpo topolobampo” el cual fue descrito por los jueces como sabor fino, salsa muy ácida pero bien logrado. Paco Chacón llevó al frente su “Pulpo fut azteca”, mismo que fue acreedor del calificativo extraordinario. Dalú ofreció su pulpo, mismo que los expertos lo calificaron como bueno, pero el acompañante fue un chimichurri que excedía de sal y armaba una carga fuerte de aceite al confitar papas en el mismo platillo.
Por su parte, Aristeo no dudó en dar a degustar su “Pulpo virolo”, preparación que los chefs estimaron sería una buena propuesta para “botanear” debido a la ración presentada. Finalmente, fue el diseñador David Salomón quien ofreció su “Chicharron chingao”, este platillo de pulpo fue un éxito ante los jueces, ya que tomó el riesgo de una preparación distinta y arriesgada en la que, a criterio de éstos, estuvo bien logrado.
Para los expertos todos los pulpos estuvieron perfectamente bien ejecutados con una cocción adecuada de la proteína. Ante dicha situación, los chefs tuvieron que deliberar y tomar una decisión con base en las salsas que acompañaron dicha preparación. Desafortunadamente fue el chimichurri de Dalú el que no logró convencer el paladar de los jueces, ya que encontraron errores técnicos en este acompañante. Así, la cantante y compositora oriunda de Sinaloa se convirtió en la séptima participante que entregó el delantal y se despidió de la cocina de “MasterChef Celebrity”.