La pandemia nos lleva a una nueva definición de la relación laboral, aunque la Ley no lo menciona, debemos adaptarnos a esta corriente en donde lo no escrito se vuelve parte de nuestra forma de actuar, es deseable que siempre que haya confianza de las partes, quizá como hace más de un siglo el valor de la palabra era sumamente respetado en todo.
En esta etapa, la certeza laboral se pierde cuando empezamos a contratar personal por proyecto, no por tiempo determinado, ni por tiempo indeterminado, esa nueva figura, aunque no tan nueva, empieza tomar forma aunque algunos juristas dirían que es un contrato por obra determinada. Lo que busca el Derecho Social es dar seguridad a la parte menos fuerte, Cicerón decía: “La Justicia no es hija de la naturaleza, ni de la voluntad, sino de nuestra debilidad”: Si el trabajador tuviera la misma fuerza económica y social que el patrón, la Justicia sería innecesaria, es en tiempos de pandemia que la realidad es superada, la debilidad de las empresas se ve claramente mostrada; ésta recesión económica ha afectado a todos; la misma Ley Federal del Trabajo que en su artículo 427 establece las causas de la suspensión temporal de las relaciones de trabajo en una empresa, se adicionó la fracción VII, cuyo texto dice: “La suspensión de labores o trabajos, que declare la autoridad sanitaria competente, en los casos de contingencia sanitaria”. Publicada en el Diario Oficial de la Federación el 30 noviembre de 2012. En esa misma fecha en el artículo 429 de la misma Ley se adicionó la siguiente fracción:
“…Si se trata de la fracción VII (del artículo 427), el patrón no requerirá aprobación o autorización del Tribunal y estará obligado a pagar a sus trabajadores una indemnización equivalente a un día de salario mínimo general vigente, por cada día que dure la suspensión, sin que pueda exceder de un mes”. El 1 de mayo de 2019 fue reformada y publicada en DOF
La realidad nos sorprendió y a casi 5 meses de iniciada esta pandemia muchas empresas han tenido que cerrar, perder capitales y despedir a muchos de sus trabajadores, perdimos todos, no hubo ni débiles ni poderosos, cada quien a solucionar sus problemas y sin apoyo del gobierno que, por cierto, también tiene problemas.
Ahora debemos reflexionar los cambios que debemos hacer, encontrar que existen otros caminos, hoy se habla de contratos por proyectos en donde el trabajador, no tiene la seguridad que él necesita, también muchos voltean al muy criticado sistema de intermediación mejor conocido como Outsoursing, en cualquier caso, la inseguridad se presenta para las partes, debemos establecer nuevas reglas y normas para enfrentar el futuro, la innovación se propone como una de las más importantes alternativas, y es ahora, que nos encontramos en Estado de Shock; recuerdo la Teoría de uno de los más famosos economistas del siglo pasado Milton Friedman que sostenía la tesis de que cuando la población se encuentra en este estado de postración, era el momento más adecuado para hacer todos los cambios porque estos serán aceptados sin gran resistencia.
Nuevas formas o ¿será que ya no hay seguridad para nadie?
Los responsables de Recursos Humanos deben tener ahora otra habilidad que sacar del baúl de las curiosidades y es la creatividad para el manejo de la relaciones interpersonales, laborales, jurídicas y sociales buscando cumplir con todos los actores de esta obra, toda vez que estamos viviendo una delgada linea de la legalidad, la sensibilidad y el respeto, lo único que no sabemos es en cuantos actos se desarrollara la obra.
Gracias Dr. Varela por su perspectiva de un panorama poco claro y sí, muy incierto.