Las investigaciones en el espacio exterior cada día nos sorprenden más, y en esta ocasión en la estación espacial internacional los investigadores de Estados Unidos e India que trabajan con la NASA, realizaron el descubrimiento de nuevas formas de vida extraterrestre, pero estas formas de vida no son inteligentes, pues se tratan de 4 cepas de bacterias que se mantienen en dimensiones nanométricas, viven en diferentes lugares de la estación espacial internacional, se confirma que 3 de estas 4 cepas son hasta el momento del completo desconocimiento para la ciencia.
Dentro de las características que se están encontrando de manera general, estas bacterias viven en el suelo y agua dulce, participan en la fijación de nitrógeno, y por igual al crecimiento de las plantas y también podrían ayudar a las plantas a librarse de patógenos, estos atributos serían de gran ayuda para la agricultura, ya que se formaría una barrera eficaz para sus frutos.
El estudio fue liberado por el genetista Swati Bijlani de la Universidad del sur de California, los resultados de su estudio de cultivo fue que las 4 cepas diferentes se ligan fuertemente con una especie ya identificada, llamada M.indicum, la investigación nos pone en el camino para ayudar con estas bacterias a diferentes tipos de cultivos.
“Para cultivar plantas en lugares extremos donde los recursos son mínimos, el aislamiento de nuevos microbios que ayudan a promover el crecimiento de las plantas en condiciones estresantes es esencial “, comenta Bijlani. Se tenía ya antecedentes de que estas formas de vida eran capaces de sobrellevar condiciones de vida extremas, en la estación espacial internacional al tomar en cuenta este conocimiento el equipo de Bijlani realizó a las 4 cepas un análisis genético para encontrar si ayudan a promover el crecimiento de las plantas.
Pasando un periodo de observación, los científicos de la estación espacial internacional encontraron que una de las 4 bacterias contenía carga genética que podría propulsar el crecimiento de especies vegetales, este hallazgo abre un campo de investigación totalmente distinto, antes ignorado por la ciencia moderna. Las condiciones de vida en nuestro planeta nos están llevando hacia otros objetivos de investigación que nos dan una esperanza de salvar lo que nuestra humanidad está destruyendo.