“Todos los niños necesitan ser acogidos y defendidos, ayudados y protegidos, desde el seno materno. #WorldChildrensDay”. Es el tweet del Papa dedicado al día de hoy, ocasión para relanzar el dramático impacto de la pandemia en los pequeños. El portavoz de Unicef Iacomini: “pedimos a los gobiernos que garanticen el acceso de los niños a los servicios de nutrición, salud y educación”.
El Papa Francisco recuerda el Día Mundial de la Infancia y la Adolescencia en un tweet de su cuenta de @pontifex en el que escribe: Todos los niños necesitan ser acogidos y defendidos, ayudados y protegidos, desde el seno materno. #WorldChildrensDay
Con motivo de este día dedicado por las Naciones Unidas a los niños y adolescentes, los datos de Unicef muestran no sólo que los niños pueden enfermar y propagar el Covid-19, sino también que la propagación del virus a largo plazo tendrá un fuerte impacto en la educación, la nutrición y el bienestar de los niños y adolescentes, y que podría afectar a la vida futura de toda una generación. Mientras el mundo intenta ganar la batalla contra el virus, asistimos a la interrupción de los servicios básicos y al aumento de los índices de pobreza: aspectos que afectan significativamente al desarrollo de los niños y adolescentes.
En su informe “Evitar una generación perdida a causa del Covid”, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia señala que en 87 países del mundo, de los 25,7 millones de casos notificados, 1 de cada 9 infectados es un niño o adolescente menor de 20 años; el 33% de los estudiantes matriculados en todo el mundo se han visto afectados por el cierre de escuelas, medida adoptada a nivel nacional en 30 estados.
Pero la cifra más alarmante es la estimación de Unicef de que en el plazo de un año el número de niños muertos podría aumentar a 2 millones debido a las interrupciones de los servicios que se les dedican y al aumento de la malnutrición; sin embargo, en 2020 otros 6 ó 7 millones de niños menores de 5 años podrían sufrir malnutrición aguda, lo que podría aumentar la mortalidad infantil, especialmente en el África subsahariana y el Asia meridional. Además, debido a la pandemia, el número de niños en situación de pobreza multidimensional, es decir, sin acceso a la educación, la salud, la vivienda, la nutrición, el saneamiento o el agua, ha aumentado en un 15% hasta alcanzar los 150 millones.
“Este mito persistente, según el cual los niños apenas se ven afectados por la enfermedad, es algo que hay que desacreditar”, dijo Andrea Iacomini, portavoz de Unicef Italia, a Vatican News, “precisamente porque, de hecho, las interrupciones de los servicios clave y el aumento de las tasas de pobreza están afectando precisamente sus vidas.
“En respuesta a esta crisis -continúa Iacomini -hacemos un llamamiento a los gobiernos y a los asociados para que garanticen el acceso de todos los niños a los servicios de nutrición y de salud, que las vacunas sean accesibles y que se apoye la salud mental de los niños proporcionándoles educación, al tiempo que se trata de colmar la brecha digital”. También sería importante aumentar el acceso al agua potable, tratar de invertir el aumento de la pobreza infantil, asegurar una recuperación inclusiva para todos y redoblar los esfuerzos para apoyar a los niños más pequeños en las zonas de conflicto, desastres y desplazamiento. De hecho, estamos pidiendo cada vez más a los gobiernos y a los asociados y al sector privado que los escuchen y den prioridad a lo que tienen que decirnos”.
Día Mundial del Niño
Un día de hermandad y comprensión entre todos los niños del mundo. Este es el propósito con el que la Asamblea General de la ONU en 1954 recomendó, con la Resolución n. 386, a todos los países que establecieran el Día. La fecha elegida fue el 20 de noviembre, día en que la Asamblea aprobó la Declaración Universal de los Derechos del Niño en 1959 y la Convención de los Derechos del Niño en 1989.