“La civil”, es la ópera prima de la directora Teodora Ana Mihai, la rumanobelga, que fue laureada en Cannes y que basó la historia en más de dos años de investigación sobre el terreno en México, en colaboración con el escritor mexicano Habacuc Antonio de Rosario, quienes han brillado en Los premios Cannes.
En aquellas tierras la directora comentó que la idea original era incluso rodar un documental a partir del testimonio de Míriam, a quien ambos conocieron en 2015 mientras buscaba a su hija, explica a la AFP Mihai.
Pero resultó ser demasiado “peligroso”. “Queríamos tener la libertad de desarrollar una historia que conmoviera y decir lo que queríamos sin poner en peligro a nadie”, añade la directora, después del estreno del filme en la sección Una Cierta Mirada.
Cielo, interpretada por Arcelia Ramírez, es una madre separada que vive en el norte de México con su hija adolescente, Laura. Esta es secuestrada al principio de la película por un cártel que exige un rescate astronómico. Aunque Cielo paga, Laura desaparece. Cuando se da cuenta de que ni la policía ni nadie quieren ayudarla, la protagonista se lanza a la caza de sus secuestradores.
Mientras esta ama de casa se transforma en combatiente, la película describe una sociedad que se ha ido resignando poco a poco desde que en 2006 México se sumió en una espiral de violencia, con más de 300 mil asesinatos, según cifras oficiales.
“Es posible que la crítica se pregunte para qué mostrar algo que ya sabemos que está sucediendo”, reflexiona esta directora, antes de lanzar su réplica: “Mientras continúe, hay que seguir hablando de la violencia en México”.