Los bosques brindan alimentos, albergue, energía, medicina e ingresos de manera directa a 1600 millones de personas. La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para Europa resaltó hoy que los impactos sociales, ecológicos y económicos negativos de los incendios forestales en los paisajes siguen aumentando.
Olga Algayerova recordó que, aunque los incendios forestales forman parte natural de muchos entornos y son cruciales para eliminar la maleza muerta, restaurar los nutrientes y regenerar los suelos, aumentarán en gravedad y tamaño y se extenderán mucho más allá de la temporada de incendios habitual.
Algayerova indicó que, si queremos alcanzar los objetivos climáticos establecidos en el Acuerdo de París, debemos tener en cuenta el riesgo de incendios forestales al gestionar los bosques existentes y planificar las actividades de plantación de árboles a gran escala.
Al mismo tiempo, abogó por la restauración de los humedales y destacó que las amenazas a las que se enfrentan los bosques sólo pueden resolverse mediante la cooperación internacional.
“Pero para poder prestar todos estos servicios esenciales, el ecosistema debe ser lo suficientemente resistente como para hacer frente a retos como los incendios. La restauración del paisaje forestal puede ser una herramienta eficaz para aumentar la resistencia de los bosques y reducir los efectos negativos de los incendios forestales”, aseguró.