En 1971 un disco puso al Rock francés en lo más alto. Esta producción no sólo sorprendió a sus contemporáneos, sino que también se convirtió en una referencia para las generaciones de músicos que llegaron después. Hoy te hablaré sobre Serge Gainsbourg y Historie de Melody Nelson, aclamado álbum que ha sido catalogado como su mejor trabajo y que recientemente cumplió sus primeros 50 años.
Serge Gainsbourg nació en 1928 y sus primeros años estuvieron marcados por la ocupación Nazi en Francia durante la Segunda Guerra Mundial. Al ser hijo de un pianista de cabaret, aprendió de música desde temprana edad y también tuvo una intensa educación artística al ser alumno de la Escuela de Bellas Artes de Paris.
Después de estar en activo para las Fuerzas Armadas de 1948 a 1949, su vida como artista lucía miserable: pintor frustrado, alcohólico, y sobreviviendo de las ganancias que recibía al tocar el piano en centros nocturnos. Sin embargo, no dejó de escribir canciones durante la década de los 50 y no fue sino hasta 1957 cuando el dueño del cabaret en donde tocaba descubrió de lo que era capaz. Al día siguiente ya tenía su propio show.
Los primeros discos de Serge Gainsbourg no fueron bien recibidos ni por la crítica contemporánea ni por el público. En aquella época el género predominante de sus producciones era el Jazz aunque pronto empezó a experimentar con sonidos de otras tradiciones como la latina y, posteriormente, la africana. A todo esto también es necesario mencionar la importante presencia de la poesía musicalizada en cada uno de sus discos.
Siendo un ávido lector, las letras de Gainsbourg están repletas de recursos retóricos y juegos del lenguaje. Para cuando llegó la década de los 60, el músico le llevaba por lo menos diez años a los participantes del movimiento contracultural ye-yé y sin embargo fue en este periodo cuando su maestría lírica le abrió muchas puertas: su tema “Poupée de cire, poupée de son” (“Muñeca de cera, muñeca de sonido”), interpretado por France Gall en 1965, le dio a Luxemburgo el primer puesto en la competencia Eurovision.
Conforme se desarrollaba la segunda mitad de la década Gainsbourg colaboró de nuevo con Gall en la polémica canción “Les Sucettes” (“Paletas”) que no era sino una cínica alusión a una felación. Siguió su breve romance con Brigitte Bardot que inspiró el disco Initials B.B (1968) en donde suena el hit “Bonnie and Clyde”.
“Je t’aime… moi non plus” (“Te amo… Yo tampoco”) fue escrita para Brigitte Bardot e incluso interpretada por ella, pero nunca se publicó. La letra, que da voz a dos amantes durante el sexo, era lo suficientemente sugestiva para que la propia Bardot le pidiera a Serge que no se lanzara. Él aceptó, pero pronto encontraría a otra voz con quien interpretarla: la de la joven actriz inglesa Jane Birkin.
La relación entre Jane Birkin y Serge Gainsbourg inició a mediados de 1968 y duró más de una década. Su primer trabajo colaborativo se lanzó en 1969: Jane Birkin/Serge Gainsbourg. La canción para Brigitte se convirtió en un éxito de ventas y como sencillo logró el primer lugar de las listas de popularidad en Inglaterra. ¿Y fue censurada? ¡Naturalmente! Muchos países la vetaron de la radio e incluso el Vaticano se pronunció en su contra.
Fue hasta el inicio de la nueva década que la idea de un álbum conceptual invadió los pensamientos de Serge Gainsbourg. Años después, el músico habló sobre la creación del que sería su siguiente disco: Historie de Melody Nelson: “Me dije que en tres minutos no iba a tener tiempo de contar una historia. Así que me dije, voy a tomar un [disco] de 12 pulgadas y me centraré en una heroína, una pequeña lolita, y mi relación con ella. El nombre vino de una carta autografiada de un almirante Nelson que le compré al padre de Jane”.
Componiendo Historie de Melody Nelson
El proceso creativo detrás de Historie de Melody Nelson inició en conjunto y continuó así durante todo el proceso de grabación. Gainsbourg y Jean-Claude Vannier habían colaborado en el soundtrack de la película Paris n’existe pas de Robert Benayoun en 1969, poco después el Serge buscó a su colega para contarle su nueva idea: “Melody Nelson”.
En esa época Serge Gainsbourg y Jane Birkin vivían en una casa modesta en Londres. Vannier recuerda el momento cuando Gainbourg le contó el plan de Historie de Melody Nelson: “Yo estaba esperando los detalles cuando me dijo: ‘Sólo tengo el título. Nada de música. Nada de letra. Nada. ¿Tienes algo entre tus cajones?’ Recuerdo exactamente su expresión, porque entonces entendí: ‘¿Tienes algo que valga la pena?’”
El disco se grabó en dos etapas. La primera sucedió en el estudio Marble Arch, Londres, del 21 al 23 de abril. De acuerdo con Vannier, Serge y él se encontraron en la sala de grabación con propuestas musicales de ambas partes. Cuando terminaron, el proyecto seguía sin letra. Un mes después, y ya en territorio francés, las grabaciones se llevaron a cabo en el estudio Des Dames de París. Jean-Claude Desmarty fue el productor.
Durante la segunda fase se eligieron los mejores momentos de lo hecho en Inglaterra y a partir de ello, Jean-Claude comenzó a escribir las partituras de la orquestación, misma que fue grabada con miembros de la Opera de París. Se estima que hubo al menos 50 músicos a cargo de los acompañamientos de cuerdas y 70 coristas. Con la capa musical completa, Serge comenzó a escribir la historia que se narraría en el disco.
Es importante señalar que durante muchos años los nombres de los colaboradores permanecieron en la bruma. De hecho, ni siquiera Vannier aparece en los créditos. No fue sino hasta tiempo después que se han ido develando algunos de los músicos participantes: Alan Parker (guitarra eléctrica), Dave Richmond (bajo), Roger Coulam (teclados), Dougie Wright (batería), entre otros que todavía no están 100% confirmados.
Finalizado, Historie de Melody Nelson fue publicado por Philips el 24 de marzo de 1971. La crítica lo aclamó desde ese momento y hasta la fecha. Sin embargo, está lejos de ser el álbum mejor vendido de Gainsbourg, con sólo unas 30,000 copias vendidas durante su lanzamiento. Ese mismo se lanzó la película de TV Melody, dirigida por Jean-Christophe Averty, que utilizó al disco como soundtrack y que cuenta con las actuaciones de Gainsbourg y Birkin.
Historie de Melody Nelson en tus oídos
Historie de Melody Nelson es un disco conceptual muy breve, dura menos de media hora. La historia que hila las siete canciones que lo conforman es bastante simple pero igualmente controversial (algo que no debería sorprenderte considerando lo que ya te he contado sobre su autor): basada en Lolita de Vladimir Nabokov, somos testigos de una brevísima relación entre un hombre de mediana edad con una adolescente de 14 o 15 años que comienza con un accidente, se enreda en un intenso encuentro sexual y termina con otro accidente.
Sus piezas más extensas son la primera (“Melody”) y la última (“Cargo culte”) que superan los siete minutos. Ambas funcionan como un espejo que suena prácticamente igual aunque con variaciones que narrativamente funcionan para cerrar un ciclo. Son, a su vez, los temas más complejos:
Dentro de los instrumentos clásicos del Rock siempre he tenido predilección por el sonido del bajo. Las densas notas del bajo de Dave Richmond son lo primero que escuchamos al comenzar Historie de Melody Nelson y como si se tratara de un Funk Noir avanza sospechoso y siniestro. Con el bajo caminando, se forma una columna a la que se le suma una distorsionada guitarra eléctrica y un arreglo de cuerdas.
Tomando en cuenta las características de las canciones que abren y cierran, el álbum tiene un progresivo aumento de intensidad: el lado A es mucho más suave, con acompañamientos de cuerdas y metales que bien podrían estar en un disco de los Beach Boys; el lado B, por el contrario, sube en intensidad, llegando a su clímax con el tema “En Melody”, un jam con agresivos rasgueos de guitarra y risas alocadas.
Aunque la lírica del disco es poética y reluciente en sus recursos retóricos y narrativos, a mi gusto lo mejor de Historie de Melody Nelson es la manera en que los elementos del Rock y la orquestación se entrelazan creando un sonido magistral en donde todo está perfectamente acomodado. Lo anterior incluye otra capa sonora: la propia voz de Gainsbourg que utiliza el Spoken Word para contar la trama.
El legado de Melody Nelson
A Serge Gainsbourg le bastaron menos de 30 minutos para crear un álbum que se convertiría en un clásico del Rock francés. Como la piedra que hace olas al caer en el agua, Historie de Melody Nelson ha inspirado a cientos de artistas (Air, Jarvis Cocker, Portishead, entre otros) e incluso se convirtió en la raíz de géneros que llegaron mucho después como el Trip Hop.
Controversial, apasionado, contradictorio en sus emociones, Historie de Melody Nelson es una obra redonda cuyo tema sin duda pondrá en alerta a múltiples escuchas, pero cuyo sonido completo maravilla. Al ser un disco tan breve, mi recomendación es disfrutarlo varias veces, te aseguro que descubrirás algo valioso en cada escucha. Ya habrá oportunidad de seguir hablando de más discos de Serge Gainsbourg, hay material de sobra.
